sábado, mayo 27, 2006

Brokeback, la tentación de lo imposible



"Brokeback Mountain" es ante todo una historia de amor que para mi es una obra de arte. ¿Por qué?: ¿Por qué es una historia de amor homosexual? No, eso solo la hace una cinta polémica en círculos machistas y retrógrados. ¿Por qué juega con la idea del macho estadounidense? No, esa razón solo la vuelve una película progresista. ¿Por qué critica a una sociedad intolerante? No, eso la vuelve valiente. Para mi, dichos elementos solo adornan a una historia que explora profundamente a la condición humana, a la lucha con uno mismo, con sus pasiones y costumbres. Ennis del Mar (Heath Ledger) y Jack Twist (Jake Gyllenhaal) son dos perdedores, dos seres ubicados en el lugar equivocado en el momento equivocado. Sin ningún futuro laboral, sin las habilidades necesarias para salir de la pobreza están condenados al fracaso. Ah, comparten algo más en común son homosexuales. Al conocerse la empatía será instantánea; sin embargo, sus diferentes caracteres los llevan a no compartir, totalmente, un destino juntos.
El introvertido y resignado Ennis luchará contra el mal que considera tener dentro, mientras el soñador Jack luchará por alcanzar su verdadera felicidad. Es a través de esas dos formas de ver el mundo que cabalgaremos por la historia de dos amantes que tras resguardarse en las montañas intentarán mostrarnos si es posible luchar contra los celos, la lujuría, el deseo y el ¿verdadero amor? antes de llegar a un poco sorpresivo final. Una bella historia a la que le robaron el cada vez menos valorado Oscar.

p.d. La frase: "Algún día Jack, algún día" dicha por Ennis merece estar entre las mejores de todos los tiempos.

miércoles, mayo 24, 2006

¿Bruno o Brunito?

La anexión de un diminutivo como cola de mi nombre me causa pavor. No soporto el ito, me llamo Bruno, !carajo!, no Brunito. Espero que disculpen el exabrupto, pero esa variante de mi nombre me incomoda en grado sumo; sin embargo, es usada con regularidad. Claro, que hay ocasiones en que escucharla no me molesta, no me voy a pelear con mi tía o mi abuelita por esa muestra de cariño, pero que mujeres de mi edad o incluso menores, y en algunos casos muy menores, lo hagan si me provoca ataque peludo.
- Nada hermano- me dice Eme, a la próxima que te digan Brunito te haces un chuzo en la cara. La conversación fue minutos después de que mi ex usara el diminutivo y tras algunas horas de que una amiga de 21 años (yo tengo 25) empezara a referirse a mi de esa manera.
Claro, ustedes pueden decir: "Ya pues, Brunito, ¿qué tiene de malo esa muestra de cariño? Ya van dos párrafos de pura bilis y no dices nada". ¿Pues qué tiene de malo? La verdad, yo creo que lo peor que le puede pasar a un hombre es ser un ito.
¿Quienes son los itos? Yo diría que hay tres categorías: 1. Los niños chiquitos, 2. Los miembros menores de un grupo humano (léase familia, grupo de trabajadores, hijos de grupo de madres que se reúnen) que por tradición quedan con el apelativo, 3. los seres humanos del sexo masculino considerados como totalmente inofensivos. Así que si tu abuelo, la vieja de la oficina o la amiga de tu mamá con la que se reúne a tomar té te dice Pepito, Alfonsito, Hernancito no hay problema; pero, si la chica que te gusta te llama así, suicídate no más hermano.
¿Qué acaso no es una muestra de cariño? Pues claro, que sí, pero también indica que eres el buenote pe, el que no despierta pasiones, el que la puede acompañar a comprar ropa, pero el futuro enamorado, agarre, choque y fuga, no, de ninguna manera. Si te llaman así ya traspasaste la línea, eres solo el amigo buenote, ese ser que las mujeres pueden tener de fan, pero al que no le darán bola. O sea lo máximo que aspiras es a ser protagonista de esta conversación femenina:
- Claudia, está simpático Julio y me parece que le gustas.
- ¡Ay, pero si es Julito!
Ya fuiste hermano acéptalo.
Ojo para que empieces a preocuparte solo es necesario que el ito lo use una mujer contemporánea. No solo tiene que usarlo la chica que te gusta. ¿Por qué digo eso? Muy simple porque si le pareces inofensivo a una chica que no te gusta, que generalmente no son las más atractivas, las posibilidades que le gustes a una tipa realmente atractiva en esta sociedad machista que no soporta a los seres débiles son mucho, mucho menores.
Ahhh, no me creen, pues hasta ejemplo de la vida real les tengo. Penúltimo encuentro antes de choteada. La chica en cuestión al despedirse pronuncia la frase fatídica: "Chau Brunito". La chica instantáneamente se da cuenta del error y reniega del ito usado. Salimos una vez más, pero la derrota ya estaba anunciada, ya me había empezado a transformar en su Brunito.
Saben, estoy preocupado, la abundancia de Brunitos me está desbordando, creo que me veo obligado a tomar medidas radicales. Por el momento, no se exactamente cuales pueden ser, pero ya estoy empezando a pensar seriamente en seguir el consejo de Eme. Me tendré que comprar una chaveta baratita no más.

sábado, mayo 20, 2006

Más que una cara bonita

Hacía tiempo que no me perturbaba tanto la carátula de una revista. Frente a mi estaba sacándome la lengua, bajo las letras de Gatopardo, Keyra Knightley, la 'bomba británica' si queremos usar el mismo apelativo aplicado por algunos tabloides. Su peinado despeinado jugaba con el vestido-túnica de enormes aberturas que también combinaba con su rebeldía de chica inocente que aún vive con sus padres. Difícil no volverse loco, difícil no quedarse con la boca abierta.
Keyra no es solo una cara, o cuerpo, bonito. Esta nominada en la última edición del Oscar ha logrado poner en aprietos a algunos de los nuevos divos de Hollywood. Clive Owen tuvo que sudar para no perder protagonismo ante la Guinevere de "King Arthur", mientras que Johnny Depp y Orlando Bloom debieron desenvainar sus espadas para no ser derrotados en "Piratas del Caribe". En "Orgullo y Prejuicio" no hubo manera de que le robaran brillo. Espléndidamente recogió el espíritu de una mujer rebelde de comienzos del siglo XVIII. Fue una heroína de novela y todos le creyeron.
Comparada con Audrey Hepburn y voceada para el remake de "Mi bella dama", ya le empezó a sacar ventaja a contemporáneas como Jessica Alba y Scarlett Johansson. De ninguna manera volverá a ser esa especie de doble de la princesa Amidala en "Star Wars, The Phantom Menace". A sus 21 años, Keyra tiene el mundo a sus pies, y a mí de alfombra.

miércoles, mayo 17, 2006

Noticia de un secuestro

Tras una semana de intensa tensión, Cableman, el alterego electrónico de Bruno Rivas, fue liberado esta mañana de su secuestro gracias a una serie de tensas negociaciones.
El miércoles 17 del presente mes se pudo ver al visiblemente afectado personaje retomar sus labores diarias dentro del chat y correos electrónicos. "Fue una experiencia realmente terrible, no se la deseo a nadie", señaló Cableman al ser requerido por periodistas locales; sin embargo, no quizo dar detalles sobre el plagio ni develar la identidad de los secuestradores.
Como ya es historia conocida, Cableman fue secuestrado el miércoles 10 del presente mes cuando se dirigía a realizar sus actividades normales dentro del messenger. Grande fue la sorpresa al interior del mundo mailistico ante la noticia del secuestro del personaje. "Nunca pensamos que pudiera ocurrir algo así. Si le pasó a él le puede ocurrir a cualquiera", afirmó Eme.
Según fuentes no confirmadas, los allegados a Cableman tuvieron que hacer una serie de negociaciones para poder liberarlo. Se vocea que una tal Lucrecia fungió como negociadora durante el rapto.
Al cierre de esta edición, se difundió la noticia de que el personaje electrónico está haciendo las averiguaciones necesarias para poder estar protegido ante un futuro plagio.

domingo, mayo 14, 2006

Dave Eggers

LO QUE SIGNIFICA QUE UNA
MUCHEDUMBRE DE UN PAÍS LEJANO
ATRAPE A UN SOLDADO QUE REPRESENTA A
TU PAÍS, LE DISPARE, LO SAQUE A RASTRAS
DE SU VEHÍCULO Y LUEGO LO MUTILE
ENTRE EL POLVO (*)
Un hombre sentía una gran inquietud. Sentía ansiedad y desasosiego. Eran sentimientos desconocidos para él. Nunca había experimentado ese hastío insondable, pero llevaba un año sintiéndolo. A veces sencillamente estaba paseando alrededor de casa, incapaz de decidir por qué estaba tenso exactamente. El día era claro, brillaba el sol, todo iba bien, pero él andaba sin parar. Se sentaba a leer un libro y enseguida se levantaba pensando que tenía que telefonear. Una vez al teléfono, caía en la cuenta de que no tenía que llamar a nadie pero que tenía que inspeccionar una cosa que había al otro lado de la ventana. En el jardín había algo que tenía que arreglar. Tenía que conducir a donde fuera, tenía que dar una vuelta. El hombre había visto la fotografía esa mañana, en el diario. Había visto la fotografía del cadáver del soldado en el suelo, bajo la camioneta. El uniforme era oscuro, el del soldado, y el cadáver yacía de espaldas con las botas, casi blancas al sol del mediodía, apuntando hacía arriba. Mientras el hombre estaba cómodamente sentado en su casa, con unos calcetines cálidos en los pies y bebiendo zumo de naranja de un vaso pesado y viendo al muerto en la fotografía en color. La imagen le cortó la respiración, a solas en casa. Examinó la fotografía en busca de sangre: ¿dónde habían disparado al soldado? No se veía sangre. Pasó la página, intentó seguir adelante, pero pronto regresó a la fotografía y miró si el encuadre incluía a algún ciudadano del país lejano. No los había. El hombre se levantó. Contempló el humo que emitía una fábrica en el horizonte. ¿Por qué se sentía perturbado? Se sentía pegado, robado, violado. Si matasen y mutilasen a un soldado en su propio país, el hombre no sentiría la misma repulsión. No se siente así cuando se entera de que han chocado dos trenes o que en Missouri una familia se ha ahogado dentro de su monovolumen en un lago en diciembre. pero esto, en otra parte del mundo, este soldado arrastrado fuera del coche, este soldado solo, su cuerpo muerto sin rastros de sangre en el suelo y bajo una furgoneta... ¿por qué le pone los pelos de punta, por qué lo siente como algo tan personal? Ahora el hombre se siente así en casa demasiado a menudo. Se siente como excavado, recubierto, desecado. Sus ojos notan la tensión de tratar de ver en la oscuridad durante demasiado rato. El hombre está contemplando el humo de la fábrica y, aunque ese día podría hacer infinidad de cosas, no hará ninguna de ellas.

(*) Dave Eggers, "How we are hungry", 2005.

miércoles, mayo 10, 2006

Liberen a Cableman

viernes, mayo 05, 2006

Sala de embarque

- Bruno, alista tus maletas te vas mañana a Puerto Iguazú.
Ante la inesperada indicación, preparé mis chivas y enrumbé con nerviosismo al aeropuerto. Tras un día estresante, que en realidad era el preámbulo de otro más estresante; la espera en la sala de embarque se transformó en un punto muerto que aproveché para poder observar con detenimiento a mis compañeros de viaje.
Argentinos, españoles, gringos, escandinavos, peruanos, formaban el abanico de nacionalidades que podía reconocer durante mi obligado reposo. La primera y única persona en tomar contacto conmigo fue una nerviosa anciana que se me acercó mostrandome su pasaje. "¿De acá sale el avión para Argentina, jóven?". "Sí, señora, de acá sale". "¿No debería haber salido, ya?. Mi boleto dice 11 y 10". "Esa es la hora para estar en la sala de embarque sin problemas. No se preocupe, señora". "No deberíamos preguntar". "Tranquila, señora, no se preocupe". Luego, de un rato de fungir de agua de azahar, pude por fin continuar con mi actitud boyerista.
Una dulce voz fue la que atrajo mi mirada. Una adolescente que risueñamente hablaba con ¿su tío? de su futuro viaje. Su madre, su hermana y su hermano, también la acompañaban. Era un niña definitivamente atractiva, de esas lolitas que pueden hacer temblar a cualquiera. Con una belleza que va más allá de lo físico ya que, a pesar de que su hermana tenía mejores rasgos, su simpatía la hacía ser la más bella de la sala. Me la imaginaba dentro de veinte años como líder de su familia, como ese integrante familiar capaz de congregar a todos los parientes por su buen animo. Con esos pensamientos no podía dejar de observarla, por momentos olvidandome de la discreción. "¿Pero, el avión no debería haber venido?". "Creo que se está demorando un poco, señora, no se preocupe".
La niña decidió ir a pasear por el duty free, así que pasee mi mirada nuevamente por entre los viajeros. Una freak europea usaba dos asientos como camas, una gordita avanzaba algún trabajo en su laptop, una pareja aprovechaba para abrazarse, un gringo lucía su camiseta del Boys. Esta vez un trío de europeos robó mi atención. El parecido físico los revelaba como hermanos. El mayor le llevaría cinco años al menor, el intermedio sería un año menor y tres años mayor que los otros. El intermedio parecía ser el más alegre, jugaba cartas con el mayor, mientras hacía bromas con el celular. El menor no jugaba, no se reía y hasta mantenía una distancia prudencial de los otros. Pensé que sería el efecto de la diferencia de edades, los otros podían ser gemelos, compañeros naturales de juegos, el otro el intruso, el que llegó de yapa. ¿Por qué estarían en el Perú? ¿Un viaje a Macchu Picchu? La pregunta empezó a volverse importante. "!Maradona!!Maradona!", la niña había vuelto y me devolvió a la realidad. Alcancé a ver la espalda del ídolo que esta vez no mostraba el número diez y vino a mi mente el recuerdo de las entradas que compré y luego regalé de su partido de exhibición. Maradona me enviaba a Argentina. Buenos días, Puerto Iguazú.

miércoles, mayo 03, 2006

"Closer" o la utopía del amor



Cuatro caras, cuatro distintas maneras de entender al amor. "Closer" empieza con una escena de antologia en la que, al ritmo de "The blowers Daughter", Dan (Jude Law) y Alice (Natalie Portman) son víctimas del conocido "amor a primera vista". El cuadrado luego se completa con el ingreso en la vida de la pareja de Anna (Julia Roberts) y Larry (Clive Owen. Usando a esos cuatro personajes, Mike Nichols nos muestra a los ideales del romanticismo (Dan), la pasión (Larry), la frialdad (Anna) y lo subrepticio (Alice) enfrentandose y entrelazandose unos contra otros hasta que los más terrenales y modernos logran salir adelante. La pugna entre esas diferentes visiones dejan a más de un herido dentro de la historia, pero le da un golpe mortal a la idea del amor tradicional propio del cuento de hadas. La historia deja en el aire a las preguntas de cuan importante es la transparencia y cuanto el misterio en una relación y alerta a más de uno a mantener el escudo puesto durante el enamoramiento. "Closer" es sin lugar a dudas una historia perturbadora, acorde con las historias de amor de nuestros tiempos, capaz de provocar temblores hasta en la tumba de Lord Byron.

p.d. cuando la vi por primera vez pregunté el por qué de la decisión de Anna y me respondieron que se basaba en simple comodidad. Un año después recién logré comprender la respuesta.

lunes, mayo 01, 2006

Que bello abril

Saldo a reparar tras los largos treinta días de abril:

1. Mandar a arreglar el discman.

2. Reportar la pérdida del rpm.

3. Regresar al gimnasio tras la infección estomacal.

4. Asimilar totalmente los 25 años.

5. Darse cuenta de una buena vez que el inglés es para estudiar.

6. Ahorrar aunque sea un poquito.

7. Alimentar regularmente el blog.